5-A-La Solana-d Carlos Castro

Comentario sobre lo sucedido en la gran tormenta

Este comentario que hacía Carlos y se publicó en la revista La Solana en el 2010 y que hace referencia a lo que en los años 70 se había dicho en aquella tertulia del Rincón de la Iglesia. Recuerda que Tomas advirtió que “en el cincuenta y tantos cayó una piedra que arrasó todo” y añade, “eso era caer piedra, ahora por no haber, no hay ni tormentas, ni nevadas, ni nada, el clima está loco”.
Parece que esas previsiones que hizo Tomás en aquel momento no fueron muy acertadas, ya que el día “2 de octubre de 2013, una grandísima tormenta de piedra, arrasó todo el pueblo haciendo enormes daños”. Los tejados, no dejó ni uno que se salvase de los destrozos, los de tejas les rompió la mayoría, teniendo que renovar todos los tejados, las naves con tejados de uralita, las hizo unos agujeros que quedaron como las cribas de cuero, también hubo que reponer todos, además destrozó persianas en las ventanas, los coches que estaban a la intemperie también produjo roturas de cristales y abollones en la carrocería, y así en todo.
Desgracias personales no hubo, porque a cuatro personas que estaban de paseo hasta el canal, las recogió el conductor de un coche que salió en busca de su esposa, que creyó que también estaba de paseo, no fue así y eso la salvó a ella y a los cuatro que de no haberles encontrado se habría producido una gran desgracia. Solo hubo un herido, en el recorrido de 150 m. que hizo en plena tormenta de piedra, algunas del tamaño de pelotas de pin-pon o mayores, fueron heridas en la cabeza y brazos, que solo necesitaron curas de emergencia.
Esta tormenta no sé si equiparable a la de los años 50 del siglo pasado que decía Tomás, pero que no recordamos ninguno de los supervivientes de aquellas fechas. Sí recordamos la impresionante nevada que cayó un día de febrero de aquella misma década en la que inmovilizó varios coches, un autobús de línea que volvía de Valladolid lleno de viajer@s en la carretera de Rioseco a Tamariz, y otro taxi en la de Castil a Villarramiel con cuatro personas empleados de banco, en ambos casos estuvieron toda la noche inmovilizados y el taxi termino enterrado en la nieve, aquella nevada sí que fue gorda, además el viento acumuló nieve en los remansos, alcanzando espesores de hasta tres metros, como ocurrió en el lugar conocido por la “cuesta de Campana de Oro” donde quedaron bloqueados. No se ha vuelto a repetir nunca.
La del pedrisco del día 2-10-13, fue tan enorme en intensidad y ámbito al que afectó, que en las referencias que aparecieron al día siguiente en la prensa de Palencia y Valladolid, señalaba que había afectado a todos los pueblos que van desde Villanueva de San Mancio en Valladolid hasta Castromocho en Palencia, unos 25 km. de recorrido y un kilómetro de ancho y ¡¡MUY DESTRUCTIVA!!
Las autoridades provinciales de Palencia, anunciaron que se evaluarían los daños ocasionados, para buscar formas de que tuvieran alguna indemnización los perjudicados y que a algunos vecinos les ponía en difícil situación para restaurar lo mucho dañado. No sé que efecto tendrían aquellas promesas y qué recibieron para solventar el enorme problema que les produjo, aquella INTENSA TORMENTA DE PIEDRA.

Francisco Delgado Sahagún

5-D-Efectos de la piedra.
5-E-Otro destrozo. mas
Comments
  • tamapotes@gmail.com'
    M. Angeles de Benito del Olmo
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    Madre mía. Menuda tormenta!!.Aunque el cambio climático es evidente, los ciclos de sequias y avenidas, de nieves , hielos, granizadas y tormentas seguirán siendo imprevisibles

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