Pregón Fiestas de San Miguel 2009 Castil de Vela

PREGÓN de San Miguel – CASTIL DE VELA. 2009

¡¡¡Buenas tardes a todos!!!. Saludo a todos los aquí presentes vecinos y a quienes como yo hemos regresado a nuestro pueblo, siendo nuestra residencia actual lejos de aquí y a los amigos que se han acercado para compartir y divertirse en la fiesta de nuestro Patrón San Miguel. Y a quienes han venido para compartir conmigo en este acto. ¡¡GRACIAS!!.
Tengo que agradecer en primer lugar el honor que me hacen quienes me han invitado a participar en este acto, que para un nacido en este pueblo de Castil de Vela, supone un reconocimiento que agradezco muy profundamente.
Creo observar que han valorado para este reconocimiento e invitación, mi divulgación de sucesos y anécdotas ocurridos en este pueblo de Castil, por los relatos que escribo y que son publicados en la Revista La Solana.
He de decir a este respecto, para que cada cual tenga el mérito que le corresponde, que la idea fue de Pilar Martín Herrero, que entusiasta e interesada como yo, por las cosas que pasan en Castil, me hizo esta propuesta: «¿¿ Paco, a ti que se te da escribir, por qué no haces algo referido a Castil y lo haces publicar en LA SOLANA??». Me gustó la sugerencia y la acepté. Ella me añadió: «Pero relatado desde Castil», Veréis que así lo vengo haciendo, en nada aparece mi lugar de residencia, León.
Quizá tenía en el recuerdo a mi padre, de quien muchos me han dicho recordarle por su particular y buena forma de contar anécdotas, o los relatos que yo ahora reproduzco de forma escrita y ampliamente divulgada.
Pues también y aprovechando las nuevas tecnologías como Internet, expando el conocimiento de nuestro pueblo por España y fuera de nuestras fronteras, especialmente por nuestra querida América Hispana, Chile, Uruguay, Méjico, etc, etc. Algunos como mi interlocutor en Argentina, a quien le une con nosotros, que el origen de sus antepasados está en Tamariz de Campos, y que su apellido SAHAGÚN, le comparte conmigo y vuestro anterior alcalde Luis Gonzalo. Me pedía le enviase todos los relatos que se publiquen, pues él los hace llegar a toda la colonia de españoles de su entorno, que dice leen con interés, pues les hace recordar el lugar de sus antepasados. Hasta ahora le complacía enviándole los escritos de forma particular, hoy ya los consigue a través de mi página Web. donde todo el que quiera los puede conseguir. Os advierto que lo podéis hacer, quienes estéis interesados, entrando en la página de Castil de Vela, ahí aparece la dirección de la misma.
En España la expansión la hago por: Cataluña, Galicia, Andalucía, Valencia, Madrid, etc, etc, aquí uno de mis interlocutores tiene el apellido VELA como segundo apellido, lo que nos permite bromear refiriéndonos a Castil, como nuestro pueblo, yo por origen propio y él por ascendientes. Dice le hubiera gustado que ciertamente su origen por línea materna de la que le llega el apellido fuera este pueblo.
Os aseguro que me agrada ese deseo, como el de todos los lugares citados en los que veo aprecian, se identifican y sitúan ya en lugar correcto en el mapa a un pueblo de España, en la provincia de Palencia que se llama CASTIL DE VELA.   A mí me gusta y espero que a vosotros os ilusione.
Es curioso señalar que en el año 1597, según dicen los documentos de que disponemos, este pueblo aun se denominaba, CASTRILLO DE VELA. Parece que fue poco después cuando se efectuó el cambio, primero a CASTRIL DE VELA, y después al actual de CASTIL.
Al referirme al motivo que deben tener mis palabras, que es la de invitar a todos a que la fiesta de San Miguel, sea lugar y ocasión de encuentro y convivencia para los que retornamos al pueblo y diversión para todos, muy en particular para los jóvenes. Tengo que recordar en mi condición de memorizador de los tiempos pasados, que en nuestros años mozos, teníamos muchas mas limitaciones para la fiesta, que la que se os ofrece a vosotros los jóvenes de ahora.
1º No disponíamos como afortunadamente tenéis ahora, de los centros de reunión juvenil, que llamáis «PEÑAS», que permite la fiesta y diversión constante y permanente. 2º Teníamos obligaciones imposibles de eludir, que había que atender y que ahora no existen. Me refiero a la atención y cuidado de los animales, ya fueran caballerías, ovejas, vacas u otros, a los que había que dar de comer, ordeñar, llevar a que bebieran, etc. Claro que también intentábamos relegar esta obligación implicando en ella a nuestros mayores.
Es por ello que, en una ocasión el día de San Miguel, Honorato con su particular gracia le dijo a mi padre:
«Isaias, para ti esta fiesta no te será nada buena». ¿Por qué?, le preguntó. Y Honorato le enumeró las causas: «Por que es normal que estrenes camisa de cuello duro, que te molesta al tener que estar erguido y con el cuello estirado. Es normal que estrenes zapatos que te estén mancando los pies. Tendrás que ir a dar
agua a las mulas a la laguna y echarles de comer, para que los muchachos se diviertan y aprovechen el baile, y además: te harán comer tarde, a horas no habituales para ti». Mi padre dice que no pudo decirle mas que,…»Tienes razón en todo lo que has enumerado».
Todo eso no lo tenéis los mozos de hoy, incluso algunas cosas de las citadas, ni siquiera las conocéis, pido a los mayores que os lo expliquen.
Las fiestas de antaño:
Ahora que las fiestas de Castil han quedado reducidas a una al año, esta de San Miguel Arcángel, quiero recordar lo que fueron en los tiempos pasados.   En los siglos XVI y XVII, se celebraban fiestas en la Ermita de San Andrés y en la del Humilladero y supongo que en la Ermita de Villalinvierno, aun que de esta no hay constancia se hicieran fiestas, según los documentos en los que encontramos los dados de las otras.
También he encontrado en una Nota del Archivero Diocesano de Palencia, D. Santiago Francia Lorenzo, que señala en un extenso comentario publicado el día 26 de julio de 1988, en el Diario Palentino, que existía en el mismo despoblado de Villalinvierno otra ermita, dedicada o bajo la advocación de Ntra. Señora de Váscones, que se obligó a demoler, por el mal uso que se hacia de ella, «por vagabundos y otras gentes de mala conducta», dice la referencia a la que aludo, y que fue por ello demolida el año 1771.
En las dos primeras, de San Andrés y del Humilladero, las fiestas las patrocinaban sus Cofradías respectivas. En la del Humilladero participaban danzantes, como también lo hacían el día del Corpus, aun que esta fuera menor y de un día solamente. Hay constancia en documentos, pero se desconoce la ubicación que tuvo la Ermita del Humilladero. La Ermita de San Andrés, donde se celebraba su fiesta respectiva, sí conocemos donde estaba, cerca del castillo y junto al antiguo cementerio. En ella la Cofradía, además de invitar a la fiesta, en la que participaba todo el pueblo, se invitaba a dulces y bebida, lo cual parece enaltecía la celebración, además de amenizarla con flauta y tambor, que tocaba la misma persona, pasando pronto a la dulzaina y el tamboril, que en ambos casos daba lugar al baile, en aquellos tiempos mayoritariamente suelto y separados de la pareja.
En el año 1825, se dice en un documento, que el Párroco invitaba a un refresco a la corporación del Ayuntamiento el día de San Miguel, costumbre contraria por lo que se ve a la actual y por la que hay que felicitar y agradecer al actual Ayuntamiento, que además supera y mucho en contenido e invitados al simple refresco que se dice en los documentos que ofrecía el párroco.
En tiempos más próximos, en la mitad del siglo pasado, además de la de San Miguel, se celebraba con carácter No religioso, la del Angel, junto a la Ermita del Cristo de Villalinvierno. No sabemos por qué tomaba ese nombre más que por coincidir ese día con esa fiesta o celebración en el calendario religioso. Pero nada más lo hacía justificable.
Esa fiesta o romería, se iniciaba por la tarde del 1 de marzo, por lo que no había ningún acto religioso. Había romería con mucha concurrencia, ya que llegaban a ella de los pueblos de: Belmonte y Meneses, casi en su totalidad, ya que estos consideraban la compartían, además de muchos de los otros pueblos como Palacios, Capillas, Villerías, Tamariz, Villabaruz, etc. yo conocí concentraciones en esa romería de hasta 5000 personas, con todos los alicientes de una romería, dulzaina y tamboril, otro corro de baile de organillo, incluso otro de flauta y tambor. Los puestos propios para la chiquillería, de dulces y chucherías. Había muchas mas actividades y festejos, como la carrera de cintas y similares, o simples carreras de caballos o burros. Aun podemos recordar los mayores, que en los últimos años de la romería, en la década de los 50, hubo toreo de vaquillas, cuando en este caserío y praderas, se recogían y pastaba la ganadería brava de los Hnos. Molero. En esos momentos la concurrencia llegaba desde toda la provincia de Palencia y parte de la de Valladolid.
Es curioso que a raíz del Vaticano II, aquello se acaba y se inicia una mínima celebración por la mañana, con misa ante el Cristo de Villalinvierno, y se hace un recuerdo a los tiempos pasados, con algunos alimentos que mantengan el tipismo, como eran los huevos cocidos, que dio origen a una denominación curiosa y provocadora, por el hecho de que se arrojaban los que sobraban de la comida, en una competencia entre dos bandos. De ello se derivó el poco aceptado calificativo de «huevos duros» que aplicado al Cristo suponía una expresión irreverente.
Hoy se ve con tristeza, que incluso esa mínima celebración ante el Cristo de Villalinvierno, que últimamente se hace, quede suprimida por los motivos que todos conocemos y lamentamos muy profundamente.
Además de estas señaladas, había otras con carácter menor, como eran: San Antón, Las Candelas, Los Carnavales, El Corpus, La Noche de Reyes, a los que se salía a recibir por los mozos del pueblo, y la más importante de Los Quintos, hoy suprimida al ser abolida la obligación del servicio militar. Todas ellas del día que se celebraban sus respectivas celebraciones.
Nos reunimos aquí hoy ante la fiesta y celebración de San Miguel Arcángel, única en los momentos actuales, salvo la de San Isidro por la invitación generosa que también hace el Ayuntamiento, pero que esta ya no tiene la repercusión en bailes y música que la aderecen, como las antes citadas.
Esta es la circunstancia en la que me veo invitado a ser quien os anuncie la llegada de la fiesta y os anime a participar en ella, lo hago con agrado, por que siempre alegra, satisface y entusiasma el ser portavoz de algo que suponga alegría y celebración, aunque al hacerlo no puedo evitar un recuerdo para los que durante este año y los inmediatos precedentes nos dejaron y que me gustaría recordar uno por uno, pues ellos han hecho que Castil se sienta debilitado en población y afectos, para ellos nuestra oración y nuestro deseo de su descanso en Paz.
Felicito a los componentes de este Ayuntamiento y a su alcalde como máximo representante del mismo, por el entusiasmo y disposición para organizar los festejos que dan contenido a esta celebración.
Debo tener un recuerdo también para la Asociación CASVEL, de mujeres que se implican con entusiasmo en organizar actos culturales, excursiones y otros acontecimientos durante el año y también en esta fiesta, con lo cual consiguen que la estancia en el pueblo sea más atractiva y deseable. Su labor es bien meritoria a favor de todos los vecinos del pueblo, mi felicitación más entusiasta y sincera.
Me honra ser sucesor en este acto de nuestro amigo, ex-alcalde de Tordesillas y ahora Diputado en las Cortes Españolas, Emilio Álvarez Villazán, del que Castil puede y está muy orgulloso que un hijo del pueblo haya alcanzado cotas tan altas en el puesto político que ocupa, deseamos que siga teniendo éxitos en esa su trayectoria profesional. Y siguiendo con el recordatorio que también hizo él en su pregón, tengo que añadir que si su abuelo Cesáreo Álvarez Álvarez era el Alcalde de Castil el 1906, en aquella misma corporación de hace un siglo, mi abuelo Marcelino Delgado Delgado también participaba como Regidor Síndico, según atestiguan los documentos. Supongo que sería como concejal, con algún cometido específico. También a mí me enorgullece poder hacer esta referencia.
Recordando también a mi predecesor en este acto, Narciso García Nieto, al que también reconoceremos sus valores profesionales y humanos y la meritoria distinción de su alto nivel alcanzado en su puesto de profesor universitario, lo que a este nuestro pueblo también enorgullece. Decía en el pregón del año pasado que: «Castil de Vela no figura ni en los relatos históricos que se guardan en los archivos, ni citado en la literatura clásica, ni en otros acontecimientos en los que se hicieron conocer pequeños pueblos de nuestra geografía española». Cierto que es así, pero aprovechemos que en la actualidad los medios técnicos son otros, que trasmiten con más rapidez y universalidad todos los hechos que se producen, debido a esos medios tecnológicos y de comunicación. A este respecto os puedo hacer conocer que, en el medio de comunicación por excelencia, «INTERNET», aparece en una página de su extensísima divulgación informativa, esta en El Norte de Castilla, en la que dice lo siguiente: (sic) «Castil de Vela, pueblo que se le conoce por celebrarse en él, campeonatos nacionales de motos de trial, con el patrocinio o promovidos por Jesús María Pérez de la Torre y por los relatos que se publican en la Revista La Solana, como son….El Reloj, o la Casa Blanca que escribe Francisco Delgado..» Aclaro, no era la competición de motos de trial, sino de moto-cros y que Jesús Mari consiguió aquí campeonatos de España, consecución muy meritoria.
Cita en ambos casos, como veis a los autores de sendos acontecimientos o reportajes. En otro lugar cita al repostero que da fama a Castil por sus dulces, Carmelo de la Torre García, que también enaltece al pequeño pueblo y nos satisface a los de aquí.
Os aseguro que me siento muy alagado en la parte que me corresponde de propiciar el conocimiento de nuestro querido pueblo.
Empecemos por tanto ahora a hacer lo que durante siglos no se hizo y algún día se pueda ver reconocido. Hemos de lamentar que en las actuales circunstancias la población disminuye de manera acelerada, pero confiemos que el proceso de reducción poblacional no continúe. Hay pronósticos que advierten que eso es posible, confiemos que así suceda. Al conocimiento de este nuestro pequeño pueblo, contribuyo también, en lo que me es posible, con la página de la Web. dedicada a CASTIL DE VELA y que espero que todos conozcáis, os sugiero lo hagáis y veréis la satisfacción que produce ver cosas de aquí tan extensamente propagadas.
Volvamos al tema de la diversión en la fiesta de San Miguel.
Los lugares específicos de diversión en la época en que nosotros lo hacíamos, hacia la mitad del siglo pasado, eran: En la plaza con la dulzaina y el tamboril, hasta los años 40, y fue la orquesta de «Los Melgos», a partir de entonces y durante unos cuantos años y esto completado con el baile del salón, el de Baldomero en esa misma época y su precedente el salón de Laurentino. En plaza y salón se concentraba la diversión.

Hoy con la existencia de las peñas y ya el salón de baile eliminado, la diversión es continua y sus horarios a voluntad de los participantes y peñistas.
Creo que me he extendido demasiado en rememorar los tiempos pasados y los aquí presentes querréis que acabe y dé comienzo la fiesta.
Intentando complaceros, alzaré la voz para decir:
Que estalle la pólvora, que se ilumine con luz y colores los lugares de la fiesta y que todos os sintáis integrados en la celebración.
Que los jóvenes se diviertan con la energía propia de su condición juvenil, pero también con la moderación que exige una buena confraternización con los demás participantes y que todos podamos hacer un balance final, satisfactorio para sí y para el conjunto de vecinos y amigos que nos honran con su presencia, para que estos lleven la voluntad de regresar el año próximo.
Antes de terminar, tengo que recordar, que no olvidéis que la fiesta se hace en honor de San Miguel Arcángel y por ello debe comenzar mañana con la celebración ante el Santo y su procesión, en la que todos participéis, con las señas de identidad de este nuestro querido pueblo, que en los documentos que son custodiados en el Archivo Diocesano del Obispado de Palencia, de los siglos XVI, XVII y XVIII, señala:
«Castil de Vela, pueblo de religión católica, apostólica y romana….»
Las nuevas tendencias y los actuales síntomas de modernismo, pretenden que aquello sea sustituido por el laicismo o agnosticismo. Os pido encarecidamente que mantengáis la fe y creencias de nuestros mayores, os aseguro que ellos os lo agradecerán, además de que con ello respetamos su memoria.
Espero que mis palabras de hoy, las interpretéis como un abrazo de amistad para todos los aquí presentes, con un especial agradecimiento a vuestro alcalde José Manuel Pérez Bernal, por la oportunidad que me ha brindado, para expresar mis emociones al verme en mi pueblo y ante vosotros.
Y para terminar, puedo decir aquello de:

En Castil de Vela fueron,
en tiempos de mari-castaña,
aguerridos y valientes
contra aquellos que acosaban.
Más es llegado el momento,
de celebraciones varias,
con fiestas de patronales,
p´al jolgorio y l´algazara,
de todos los que aquí vienen
y todos que de aquí marchan,
Bienvenidos seáis todos,
y a pasarlo bien,
os invita quien os habla.